¡Detente un momento!
Si, si, hablo contigo mi querido lector...
¡Sorprendido...!
No me extraña, te llevo observando bastante tiempo y detecto una buena carencia de positividad y de auto-conocimiento.
¿Te encuentras bien?, ya entiendo..., te afecta mucho lo que dicen de ti, ¿verdad?.
¿Por eso estás tan decaído?
Te sonará extraño pero esto es un síntoma del miedo al qué dirán, del miedo a arriesgarte, a dar ese paso que tu propio yo quiere dar para despegar, del miedo a los demás que, por cierto, no hay nadie superior a nadie, ni nadie inferior a nadie, somos todos iguales, vistos desde cualquier dimensión y desde cualquier perspectiva. No hay nadie mejor ni nadie peor.
Por ello... ¿Desde cuando no piensas en ti?. ¿Desde cuando no cierras tus ojos y te auto-analizas como si fueras un espectador de tu propia vida?, y de esta forma, mostrarte a ti mismo, que tu tienes la fuerza para alcanzar lo que te propongas, sin que nada ni nadie te pueda frenar en tu propia vida, o te pueda capar tu personalidad o te pueda hundir sin tu consentimiento. Utiliza tu fuerza para creer en ti, para apostar por ti.
"No dejes que nada ni nadie sea capaz de quitarte la libertad de vivir tu propia vida".
Raquel Hermida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario