Ya hace 3 años que escribí sobre este tipo de personajes, que están en todas partes y que se cuelan sin permiso en empresas y familias devorando y destruyendo todo lo que encuentran a su paso. Son esas personas que te roban a ti, a tu equipo y a tu familia, que nos roban esa fuente de energía que nos alimenta todos los días, que nos hace levantarnos motivados, que nos hace ser felices, esa chica o chico que es capaz de, con sólo una frase o una actitud, destruir todo lo que has creado y todo lo que amas, poner en contra a personas de tu propio equipo o de tu propia familia. Esos personajes que consiguen una desmotivación total con lo que haces, una desconfianza con todo lo que te rodea, un sin vivir en tu propia vida.
Son personajes que no se merecen respeto, que no son profesionales, vamos que no son personas, SON TÓXICAS, o también conocidas por mí como sanguijuelas de energía, que te chupan tu energía y hasta te envenenan.
Por eso, desde mi humilde entrada, os pido que hagamos un esfuerzo para ser fuertes y apartarnos de estos personajes tóxicos que sólo miran por sí sin importarles lo que está provocando, lo que están destruyendo y cómo juega con la vida de los demás, ese familiar que se está malmetiendo constantemente en asuntos que no le competen, provocando un desequilibrio familiar, o esa compañera o compañero que parece que no ha roto un plato y que te camela aparentemente como compañera/o estupenda/o y que se está cargando tu equipo y hasta tu propio puesto de trabajo.
Con esto, sólo me queda deciros que le digáis.....
¡Apartate de mi!